En el toldo muchas veces no hay tiempo para tanta charla, porque velozmente hay que emparchar sus telas descosidas, dar una puntada rápida a nuestras clases, talleres, encuentros. Muchas veces tenemos que salir apurados a trabajar y, casi al modo de un remiendo, nos vemos en la necesidad de sacar de algún lado una consigna que tenga que ver con aquello que estamos enseñando. Muchas veces el parche perdura, se hace fuerte en sus costuras y se convierte en toda una redefinición de ese tal o cual contenido con el que estamos lidiando.

Por eso abrimos este espacio. Se trata de compartir la adrenalina de agarrar la consigna de otro u otra para hacerla propia y remodelarla en función de nuestras coyunturas.

Ahí vienen otros colegas estresados que pasarán raudamente por el toldo porque tienen que llegar a su clase, taller, encuentro, y no saben aún qué ofrecerán en ellos. Tómense un mate amigos… No, no, no: sin remordimientos… Aquí abajo van las ayudas.

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